domingo, 6 de septiembre de 2015

!!! Me han dado...CALABAZAS!!!








La calabaza es una hortaliza que como fruto comestible, está disminuyendo su consumo de nuestra mesa sustituida en gran parte por la patata, pese a que la calabaza da en los guisos, una consistencia similar a la que se puede conseguir con el puré de parata o las patatas cocidas, y les añade una especial suavidad.

En cocina, la calabaza se utiliza para hacer mantequilla vegetal, tartas, flanes, panes, galletas y sopas. Como sus flores son comestibles, actualmente se ha puesto de moda en Europa comerlas junto a los brotes tiernos en ensalada, costumbre muy extendida en climas tropicales, donde hay variedades de calabaza que se cultivan específicamente con este fin.

Pero la calabaza tiene otros muchos usos, se cultiva por su carne, por las pepitas, para repostería, (cabello de ángel), como pienso para animales, para hacer recipientes como las cantimploras de los peregrinos, (Lagenaria siceraria), como elemento típico de la fiesta de halloween, (las típicas linternas de calabaza). Por otra parte, los frutos desecados se utilizan en centros de flores secas e o incluso la misma planta de calabaza se utiliza como planta o ornamental en jardinería.

Existen multitud de variedades, que se escogerán en función del uso que se quiera obtener. Según la variedad, el fruto puede ser muy variado tanto en tamaño, (desde calabazas del tamaño de un puño a calabazas de 20 kilos), como en la forma, (los hay esferoidales, aplanados, curvos o estrangulados), y en  la piel, (puede ser lisa o rugosa, o con una especie de verrugas), el color ,(los colores más habituales son verde, el ocre, amarillo o verde grisáceo, y pueden ser de color uniforme o con varios colores) y la propia pulpa que varía de color, (de un color naranja a colores
crema pálidos) y de proporción con las semillas, (hay calabazas carnosas y calabazas en las que predominan las semillas).

Dada las variedades de calabazas y la amplia zona geográfica donde se cultiva y los diferentes destinos para los que se siembra, la descripción que presento se ajusta a las necesidades que tiene la gran mayoría de ellas, pero puede ocurrir que determinadas variedades, se aparte mucho de estos requerimientos por lo que habrá que consultar al suministrador sobre los cuidados específicos de la variedad.

La calabaza, conocida en algunas partes como zapallo (Mejico y sudamerica), pertenece al reino planteae de la división magnologiophyta, clase magnolipsida, orden cucurbitales, familia de las cucurbitaceae y género cucurbitita.

La familia de las cucurbitáceas comprende unas 850 especies de plantas casi siempre herbáceas, trepadoras o rastreras, que producen frutos generalmente grandes y protegidos por una corteza firme, que agrupa plantas de frutos carnosos tan comunes como el melón, y la sandía, los calabacines, pepinos y pepinillos.

Como otras muchas hortalizas, la calabaza procede de la calabaza silvestre originaria de América Central, que fue domesticada y cultivada durante siglos para aprovechar principalmente sus semillas, pero con el tiempo se consiguieron variedades con más pulpa y sabor más afrutado, pasando a ser principalmente una especie cultivada por la carne de sus frutos.



Su cultivo se extendió desde América Central todo el continente americano y en el siglo XV los españoles la introdujeron en Europa, difundiéndose su cultivo con gran rapidez. En la actualidad, se cultiva en terrenos cálidos y húmedos de todo el mundo).

Las calabazas se dividen en tres especies principales:

Cucúrbita pepo

Cucúrbita Moschata

 Cucúrbita máxima

 Siendo esta última como su nombre indica el prototipo de la familia de las Cucurbitáceas.

Es una planta anual que se desarrolla horizontalmente cubriendo una buena extensión de terreno. Una planta puede llegar a cubrir un radio de 0,5 m. a casi 1 metro, siendo el espacio que ocupa el mayor problema que crean en los huertos a familiares donde generalmente el espacio es escaso.

Crecen con facilidad en un amplio rango de climas templados, y solo tendremos que protegerlas en invernaderos si deseamos forzar la cosecha para tener las calabazas tempranas en la época de riesgo de heladas, necesita mucho sol y casi todos los suelos le valen, con tal que no se seque con rapidez.

La calabaza crece en gran cantidad de suelos pero prefiere suelos ligeros, silíceos, bien drenados, con mucha humedad; no resiste las heladas ni la sequía.
Use guantes cuando trabaje con plantas de calabazas pues muchas variedades tienen tallos con espinas.

Una característica de las cucurbitáceas en general y más aun, de las calabazas, es que sus flores se polinizan con facilidad con cualquier otra especie de cucurbitácea, ello no se aprecia en los frutos que produce la planta, que tendrán exteriormente el mismo aspecto y sabor, pero si en las semillas, que serán híbridas y que de sembrarse, mostraran características no esperadas. Por esta razón debemos utilizar solo semillas de frutos especialmente dedicados a ese fin o con buena garantía por parte del suministrador.

Requerimientos del cultivo

Temperatura

Para la siembra conviene una temperatura mínima de 15ºC, o realizarla en invernadero. La temperatura óptima de desarrollo está en una mínima de entre 12°C de mínima los 24ºC de máxima, aguanta mal los fríos y temperaturas mayores de 35°C. Crece en zonas de clima cálido a tropical, con buena humedad.

Humedad

Un 70% de humedad relativa es óptima. Por encima del 80% hay riesgo de ataque de hongos, aparte que el polen se apelmaza y disminuye la fertilización de las flores.

Una sequedad por debajo del 50% también afecta la polinización de las flores También una humedad relativa baja dificulta la fijación del polen al estigma de la flor., Sin embargo las calabazas toleran bastante bien períodos cortos calurosos y secos.

Riego

Las calabazas toleran bastante bien períodos cortos calurosos y secos y debemos distanciar los riegos para ayudar a combatir las enfermedades por hongos. No obstante, cuando las plantas estén creciendo con fuerza, vigile que no les falte agua. Los momentos más necesitados de riego en las calabazas son apenas sembradas y en la etapa de floración y fructificación. También si a principios del verano no llueve debe regar de vez en cuando. Debe suspenderse el riego 20 días antes de la cosecha.

El peligro de hongos en variedades rastreras es evidente, por ello es la más adecuado el riego por mangueras exhudantes o el riego gota a gota, mientras que en las variedades reptantes se debe dejar secar la superficie de la tierra entre riego y riego para combatir la podredumbre, por ello es más adecuado riegos intensos, “a manta”, seguido de prolongadas fases sin regar.

Las enfermedades fúngicas (hongos, virus y bacterias) en las calabazas comunes se pueden prevenir colocando bajo el fruto un soporte que impida su contacto con el suelo. La decisión de regar nos la dará el grado de humedad de la capa de tierra
a uno o dos centímetros de la superficie. Cuando esta capa de tierra comience a dar muestras de sequía ha llegado el momento de volver a regar.
Si se planta en tiestos matas de calabazas enanas, hay que tener en cuenta que existe un mayor riesgo de sequía en especial en días secos y ventosos y en las horas de calor intenso, por lo que conviene extremar la frecuencia del riego.

Luminosidad

La planta exige estar expuesta a mucha luz, lo ideal es a pleno sol. Una luminosidad reducida puede incidir en la floración, fecundación y el desarrollo vegetativo. En su cría en tiestos debe tratarse que estos no queden a la sombra dura un tiempo prolongado

Requerimientos del suelo

La calabaza es una planta que no necesita un suelo de calidad, prefieren suelos sueltos, moderadamente tolerantes a la acidez en un pH 5,5-6,8. Es bastante resistente a la sequía pues el sistema radical puede llegar hasta 1,5 m de profundidad. Es medianamente resistente a la salinidad del suelo. La producción temprana se facilita con suelos arenosos, ricos en materia orgánica.

Abonado

Salvo utilizar una tierra muy esquilmada, no abonar con compost pues causaría un exceso de nutrientes a la planta y humedad que no convienen a la planta debido al aprovechamiento que ejerce su gran sistema radicular.
Principales variedades de calabazas

Pretender  aquí hacer referencias a los cientos de variedades de calabazas, es imposible. Aquí nos limitaremos a hablar de las calabazas más corrientes.
Las calabazas se pueden clasificar por varios aspectos, la FAO las divide en calabazas de verano e invierno por la época de cosecha.

Las calabazas de verano

Comprenden las calabazas de piel fina que se recogen durante esta estación, los calabacines y algunas calabazas ornamentales. Son especies de crecimiento
rápido que suelen producir frutos al cabo de un par de meses después de la plantación. Todas ellas pertenecen a la especie Cucúrbita pepo ssp. pepo. Suelen ser más pequeñas que las de invierno, con la pulpa más clara y suave.

Las calabazas de cuello torcido: De verano presentan un color amarillo pálido y numerosas excrecencias en la piel. Son calabazas de maduración muy temprana y pertenece a la misma especie que las anteriores.

Calabaza verrugosa: Son aquellas que se utilizan fundamentalmente por las verrugas de su piel con valor ornamental.

Calabaza bonetera: Pueden ser amarillas o verdes. Presentan forma de gorro aplanado y su tamaño es grande. También se conoce como calabaza pastelera.

Calabaza delicata: Son pequeñas y alargadas. Amarillas o verdosas con tiras más claras y pulpa amarillo clara.

Calabaza espagueti: Forma alargada. Las variedades antiguas presentan un color amarillento pálido o blanquecino. La variedad más conocida es la conocida como “orangeti” con pulpa amarillenta y de sabor más dulce. Todas ellas poseen una fibra que se deshace en forma de hilos y que recuerda a los espaguetis.

Calabaza vinatera: Tiene forma de botella. Se llama así porque se utilizaba como recipiente para guardar vino.

Calabazas de invierno o de corteza dura

Dentro de este grupo tendríamos la mayoría de las calabazas ornamentales y algunas otras variedades de corteza gruesa, más basta y verrugosa que las de verano y de forma menos simétrica. Su producción se centra desde principios de otoño a finales de invierno. Entre las principales calabazas de invierno tenemos:

Las calabazas de cuello torcido: De invierno, a diferencia de las de verano, presentan la piel lisa que puede estar cubierta de tiras de color. Pertenecen a la especie Cucúrbita moschata.

Calabaza de la cera: Es un tipo de calabaza china de corteza muy fina que recuerda la textura de la cera. Posee piel marrón con tiras blancas, pulpa de color amarillo de mucho dulzor. Pertenece a un grupo híbrido de calabazas orientales o calabazas de Japón que se caracterizan por ser plantas de porte más pequeño que las occidentales. Dentro de este grupo tendríamos variedades como la calabaza de la India, que es de color verde exteriormente y pulpa de color blanco. Se utiliza habitualmente en la cocina de este país o la calabaza de Corea, que se utiliza principalmente para la producción de calabacines.

La calabaza de cidra o almizclera: Es un tipo de calabaza con pulpa amarilla y forma de pera grande.

La calabaza de cabello de ángel: También llamada calabaza confitera y conocida también por hacerse con la pulpa de la misma una mermelada con la que se elaboran todo tipo de pastas.
Calabazas botella: Dentro de las cucurbitáceas y perteneciente a la especie Lagenaria siceraria, tenemos las calabazas botella. Estas calabaceras son especies monoicas (que tiene separadas las flores de ambos sexos en  la  misma planta) procedentes del África Tropical y de la India. La calabaza botellas se caracteriza por poseer flores de color blanco, en vez de las típicas flores amarillas de las Cucúrbitas. Ha sido utilizada tradicionalmente en México y Arizona como recipiente de la cocina y como recipiente de agua. Este tipo de contenedor es todavía utilizado actualmente por algunos indígenas para guardar el agua, dado que pesa menos que la cerámica y que ayuda a mantener el agua más fresca. Su tamaño puede variar desde algunos centímetros a un par de metros. Muchos artistas del nuevo mundo han utilizado y siguen utilizando la corteza de estas calabazas para dibujos e imprimir sus diseños.

En España se suelen encontrar además las siguientes variedades:

Verde de España (C. máxima).
Totanera.
Butternut (C. moschata).
Confitera de cidra (cabello de ángel, C. ficifolia).
Dulce de Horno.
Roja de Etampes.
Mammouth.
Ohio.
Llena de Nápoles.
Amarilla grande.
Amarilla de París.

Modo de cultivo

El mayor problema que presentan las calabazas en un huerto familiar es el espacio que ocupan por lo que solo lo recomiendo para huertos de tamaño medio o grande.
Como siempre, el principal problema será proveernos de las semillas para nuestro cultivo, máxime cuando por la facilidad de hibridación de la planta cucurbitácea, no os podéis fiar de cualquier semilla que os den por las buenas. Aparte de poderlo hacer con cierta seguridad en los lugares que periódicamente los aficionados intercambian semilla, (confirmar que las que os dan procede de flores polinizadas a mano) En Madrid por ejemplo se reúnen en el
Banco de Semillas del Centro de Arte Matadero  (Plaza de Legazpi  8. Madrid).Tendréis que probar suerte buscando por Internet ya que por este medio se ofrecen una amplia variedad de semillas.

Uno de los pocos sitios donde se pueden encontrar una amplia variedad de semillas  de calabazas de siempre es en Thompson and Morgan con una colección de 53 semillas de calabazas diferentes, que puede parecer mucho pero que no lo es en una especie que tiene infinidad de usos diferentes, se cultiva en variedad de climas amplia y que tiene variedades tempranas y de invierno. Es  la colección más extensa de semillas que existe en Internet, aunque  en  cualquiera tienda o vivero  hay solamente  unas pocas variedades de semillas diferentes.

Conviene remojar previamente la semilla 24 horas antes de la siembra, pondremos las semillas en un volumen de agua doble del que ocupen las semillas

Solo podremos cultivar en macetas las variedades de calabaza enana, utilizando macetas de 30 cm de diámetro y 30 cm de fondo con un espacio de medio metro alrededor para que puedan extender sus ramas.

La plantación, sea en semillero o directamente en el bancal, se realiza enterrando de dos a cinco tres pepitas juntas en un mismo hueco, (para asegurarnos que las semillas germinen) y una vez germinadas se seleccionan en cada agujero dos plantas solamente.

Si se planta en el bancal definitivo variedades rastreras la distancia entre dos huecos debe ser de 1,5/2 metros de los otros para prevenir el posterior desarrollo. Las calabazas rastreras necesitan un radio de 0,5/1,0 m para desarrollarse, por ello es mejor prepararlas por separado.

Hay algunas variedades trepadoras que requieren tutores. En este caso de se suelen dejar como mínimo 10-12 cm entre líneas y 10-12 cm entre plantas dentro de la misma línea.

Las variedades semi-arbustivas se plantan en pequeños montículos a 2,5 cm de profundidad (cuatro o cinco semillas por hueco). Realce  cada montículo a medida que crecen y deje finalmente solo las dos mejores plantas. Deje un espacio de 1,20 m entre montículos y ponga hileras al tresbolillo de modo que los hoyos contiguos formen un triángulo equilátero de 1,20 de lado.

Las variedades enanas deben plantarse a 2,5 cm de profundidad. Y el marco del tresbolillo en este caso puede reducirse a 50/60 cm. entre agujeros. Cuando las plántulas tengan dos hojas verdaderas habrá que seleccionar la mejor de cada hoyo para dejar una sola. Las calabazas más pequeñas, empleadas generalmente para decoración, se pueden cultivar en tiestos o jardineras que pueden estar en los balcones o en las ventanas de la casa.

No obstante hay tal variedad de calabazas y adquieren tamaños tan diferentes según el clima que todas estas cifras son orientativas, por poner un ejemplo en climas tropicales, los más favorables para el crecimiento de las calabazas se aconsejan los siguientes marcos:

Cucurbitáceas de guías largas: tres tipos e marcos 6 x 1 m, 4,5 x 1,4 m, 5 x 1

Cucurbitácea de guías cortas: 2.7 x 1.8 m, 5 x 1 m

En función del clima del lugar donde tenga el huerto decida Vd. mismo que marco elige para su variedad de calabazas.

Siembra

La semilla necesita poca agua en el suelo para germinar. El poder germinativo de la semilla dura varios años; cuanto más duro es el fruto, mayor es el poder germinativo y más rápido la germinación.

En España se recomienda sembrar la calabaza a principios de Abril al comienzo de la primavera, pero si se desea adelantar el cultivo, puede sembrarse en semillero protegido y trasplantarlas a su emplazamiento definitivo cuando ya no haya riesgos de helada y las matitas tengan al menos dos o tres hojas. Pasada la época de
heladas pueden plantarse directamente en el terreno progresivamente hasta el comienzo del verano. Las calabazas que se utilizan como adornos de Halloween deben plantarse según el clima local desde fines de mayo, en los sitios más fríos, hasta a principios de julio, en los cálidos. Normalmente la calabaza se cosecha alrededor de seis meses después de la plantación.

En resumen, en nuestro país las semillas que plantamos en febrero/marzo en invernadero pasaran, en clima cálido, a los bancales en abril y podemos seguir sembrando hasta finales de Mayo. Comenzando seis meses después a dar sus frutos es decir entre Julio/Agosto las calabazas de verano y acabarán en octubre las de invierno finalizando de recoger los últimos tomates cinco meses después, es decir a finales de Septiembre.

Más allá de esta fecha dependerá del clima local pues las Calabazas no aguantan temperaturas por debajo de las 12ºC
Una familia de cuatro personas se calcula que puede consumir una media 1/2 kilo mensual de calabazas Para conseguir esta producción basta plantar dos plantas una temprana y otra tardía, si todo sale bien tendrán suficiente producción con la ventaja de que los frutos se conservan baste bien en sitio seco y fresco

Esto indica que no debería haber más de 2 planta de calabaza en producción simultánea lo que ocupará dos metros cuadrados de terreno cada planta un metro cuadrado lo que supone el uso entre 3/5 semillas de dos variedades diferentes.

Cuidados en su cultivo

Las calabazas necesitan de pocos cuidados aparte del riego, tan solo eliminar en los puntos de siembra las plantas en exceso una vez que hayan germinado las semillas y escardar la maleza que crecen alrededor de las calabazas con un laboreo poco profundo o con una azada.
Se aprovecha también este repaso para retirar las hojas enfermas o viejas, con el fin de aumentar la aireación de la planta y la insolación de los frutos, retirando del bancal los lo cortado y las hojas secas y enfermas, con el fin de cortar las posibles propagaciones de enfermedades. Los restos cortados se pueden echar en la compostera, salvo que haya en alguno claros síntomas de enfermedad, en cuyo caso, lo más prudente es quemarlos.
También se puede realzar el montón donde se plantó la calabaza con el fin de acercar más tierra a sus raíces.

Aporcado

Con el fin de favorecer la formación de raíces se suele cubrir la parte inferior de la planta con arena. Sobre todo se suele realizar en terrenos muy arenosos, que necesitan mayores raíces para el aporte de alimentos, en terrenos ricos no es necesario, aunque un poco de aporcado nunca viene mal.

Tutorado

En las variedades de enrame es imprescindible mantener la planta erguida y evitar que las hojas y los frutos toquen el suelo para evitar los hongos, mejora la aireación y favoreciendo el aprovechamiento de la luz así como facilita la realización de las labores. La sujeción se realiza sujetando la planta a las espalderas cuando la planta alcanza los 40 cm. y a medida que por si misma no puede mantenerse
erguida. Se utiliza alambre de jardinero (cubierto de plástico, como el de cierre de bolsas), el alambre debe sujetar la planta a la caña pero no asfixiarla. Cuando la planta alcanza la altura superior de la espaldera, (unos 2 mts), se deja caer del otro lado sin que sea necesario seguirla o bien si hay competición por la luz, con la planta de enfrente, desviándola hacia un lado por la caña superior.

Flores masculinas y femeninas

En las cucurbitáceas (como el pepino, la calabaza común y ornamental, el melón y la sandía). Casi siempre, las primeras flores son masculinas. El polen de estas primeras flores masculinas atrae a las abejas y les indica dónde están las plantas en flor. Cuando las primeras flores femeninas se abren, la ruta de las abejas ya está establecida y son las abejas quienes después transfieren el polen de las flores masculinas a las femeninas. Las flores masculinas florecen durante un día y después se caen. Es posible que bajo ciertas condiciones las flores masculinas predominen, especialmente a principios de estación. Los frutos pequeños que se ven en la base de las flores pequeñas las identifican. El pedúnculo de las flores masculinas no se hincha.

Polinización

Las Flores son solitarias, axilares y pentámeras con los pétalos carnosos. Estigmas lobulados en cantidad de tres.
Las masculinas campanuladas de cáliz corto y expandiéndose hacia el ápice
Las femeninas de peciolo ancho y robusto con ovario desde globoso hasta cónico.
La manera más fácil de reconocer la flor hembra de la calabaza, es observando en la parte de atrás de todos sus capullos. Notaran que en algunos hay un pequeño fruto de la calabaza, este es el ovario aun sin polinizar, por lo tanto esta es la flor hembra.

La flor macho crece directamente en el tallo de la planta y no tienen fruto. También es generalmente un poco más pequeña que la hembra.

El polen de las flores macho se necesita para la polinización de las flores hembras. Normalmente esto sucede con la ayuda de las abejas. Las primeras flores que aparecen son las macho y estas empiezan a atraer a las abejas, unos días después aparecen las primeras flores hembras. Cuando la planta tiene ya los dos tipos de flores las abejas tienen también ya establecida la ruta y transfieren el polen de las flores macho a las flores hembra.

Si el cultivo de la calabaza se hace en un huerto urbano (balcón, terraza etc.)  y dado que  en las ciudades no hay abejas,  tendrás que ser tu quien con ayuda de un pincel polinices las flores. En este grupo de cucurbitáceas son corrientes la polinización cruzada entre las variedades de una misma especie (pueden ser llamadas calabazas, calabazas ornamentales). No dándose polinización cruzada entre variedades de especies diferentes. Por ejemplo, el zucchini se cruza con la calabaza Howden’s Field, con el zapallo (calabaza sudamericana)  acorn o spaghetti, con las calabazas ornamentales pequeñas o con las calabazas miniatura Jack-Be-Little porque todos son miembros de la misma especie botánica (C. Pepo).
La polinización cruzada no afecta el sabor, la forma o el color del fruto de la estación actual, pero los cruzamientos se hacen evidentes si las semillas de estos frutos se guardan y se cultivan al año siguiente. Debido a que las abejas trasladan
polen a distancias de un kilómetro, en zonas de muchos huertos las distancias entre los mismos no garantiza buenas semillas, para obtener semillas puras de variedades no híbridas es necesario embolsar las flores y polinizar a mano.

Recolección:

Use guantes cuando coseche calabazas pues muchas variedades tienen tallos con espinas.
La cosecha se lleva a cabo a los 3-5 meses de la siembra, según la variedad. Cuando los frutos maduran, cambian de color y su piel se endurece, ya estarán listos para su recolección. Los que se cultivan tempranos se los cosecha antes de llegar a plena madurez, en cambio, las calabazas que van a conservar, se las cosecha cuando el follaje se ha secado y la corteza es bien dura, El momento ideal de cosecharlos en cuanto aroma y textura, es cuando se seca el tallo (se vuelve de color marrón) que une la calabaza a la planta. Además, su piel intensificará el color y se endurecerá.

Después de la cosecha, si el producto va a ser conservado y/o va a ser transportado a distancia, es fundamental enfriarlo. El enfriado (también conocido como “pre enfriado”) elimina el calor acumulado por el producto en el campo, y ha de realizarse previamente a cualquier otra manipulación posterior. Cualquier retraso en el enfriado reducirá la vida post cosecha y disminuirá la calidad del producto. Incluso los productos que han sido sometidos a sucesivos calentamientos y enfriamientos se deterioran más lentamente que aquellos que no han sido enfriados. Bien conservadas, las calabazas se pueden durar perfectamente seis meses aproximadamente.

Corte las calabazas con cuidado evitando dañar el tallo, utilizando una tijera de podar o un cuchillo afilado y deje un pedúnculo de unos pocos centímetros, sobre todo si se pretenden almacenar. Si arranca las calabazas de las plantas, lo más probable es que rompa el tallo y generalmente, las calabazas sin tallo no se conservan en buenas condiciones.

Coseche hasta a finales de septiembre o a principios de octubre, antes de que lleguen las heladas fuertes. Si las plantas se mueren prematuramente por enfermedades u otras causas, coseche los frutos que tengan y manténgalos en un lugar templado y seco hasta su uso.

Una vez cosechadas evite en los transportes cortarlas y golpearlas. Los frutos que no han madurado bien, los que han sido dañados y los que han sido expuestos a heladas fuertes no duran. La temperatura ideal para almacenaje debe ser de entre 12º y 15ºC.

Las pipas son blanco-amarillentas, aplanadas, lisas, grandes. Durante muchos años se consumían tostadas antes de ser sustituidas en el comercio por las pipas de girasol.

Calabazas Gigantes:

Una afición común es obtener calabazas gigantes, Para ello se debe comenzar por utilizar variedades de frutos grandes (variedades jumbo), por ejemplo la calabaza “‘Dill’s Atlantic Giant’ Cucurbita maxima de la casa Thompson and Morgan, se plantan a principios de junio y se deja un circulo de unos 2 metros para el desarrollo de la planta, se realze el terreno con un montículo y  en  lo alto del montículo se deja una o dos semillas.
Es esencial contar con un suelo fértil, y realizar un control de insectos adecuado y hacer un laboreo poco profundo. Cuando comiencen a florecer se deben de quitar las primeras dos o tres flores femeninas para que alcancen la planta alcance un tamaño mayor y den hojas más grandes antes de dar frutos.
 Dejar que se desarrolle un solo fruto y luego arranque todas las demás flores femeninas. Cuidar que  los nudos cerca de los frutos echen raíces porque estos frutos crecen tantos y tan rápidos que podrían provocar la ruptura y separación de la planta

PLAGAS Y ENFERMEDADES

No me cansaré de repetir que en un huerto familiar  deben utilizarse fitosanitarios en fase preventiva. De no ser así pues al estar cultivando y en diferentes procesos de desarrollo, en  muchas hortalizas existen bastantes riesgos de contaminar otros cultivos e intoxicar a las hortalizas que estemos consumiendo. Sin embargo hay tratamientos autorizados en la rigurosa agricultura orgánica que pueden aplicarse siempre aplicando todas las medidas de precaución adecuadas. Por ello es conveniente aplicar medidas preventivas más que tratamientos a posteriori. Como cualquier fruto carnoso, las calabazas son asediadas por diferentes depredadores, el mayor riesgo lo presentan los hongos como el oídium , el Mildiu Velloso (pseudoperonospora) y Mildiu polvoriento (Erysiple cichoracearum) y el tizón polvoriento, que desarrolla un moho blanco y polvoriento en la superficie externa de las hojas.

La prevención está en  distanciar los riegos y colocando bajo el fruto un soporte que impida su contacto con el suelo. Se puede dar también como medida preventiva y regularmente los productos fungicidas típicos, como el oxicloruro de cobre.

También puede ser atacado por determinadas enfermedades víricas del tipo del mosaico contra las cuales poco podemos hacer salvo cortar y quemar toda hoja o tallo que presente síntomas de enfermedad.

Aparte están los insectos como el Pulgón negro, la Araña roja, la Mosca blanca, nematodos y orugas. Hay que estar especialmente alerta a fines del verano, a la aparición de estos insectos que pueden dañar los frutos maduros, arruinar su apariencia y dificultar su almacenaje.

Las medidas preventivas son las habituales, colocar trampas de insectos, fomentar la aparición de depredadores naturales, mariquitas, pájaros insectívoros etc. eliminar los insectos y sus huevos manualmente y rociar con productos permitidos por la agricultura ecológica.

Ya sabeis, una calabaza será siempre un 4,9.




Articulo colaborado de Felix Macho.